Cuando piensas que para todo el mundo eres una imágen complicada de la que algunos huyen como de la pólvora, siempre en el camino ya sea la vida o el destino, te ponen personas que ven en uno lo que realmente es y dan la oportunidad de demostrar,todo lo que uno piensa que puede llegar a dar.
Es muy complicado encontrarse en el mundo ecuestre a alguien que verdaderamente se interese por uno mismo, sin caer en el dramatismo de " la discapacidad" y apostar por la persona que tiene delante y quiere darlo todo y más ; pues bien, yo tras siete años intentando formarme como jinete de doma clásica adaptada me ha costado encontrar monitores ecuestres que hayan sabido separar entre lo que ven en mi como persona ,con aspecto físico impactante y el aspecto del aprendizaje ecuestre. Siempre han cogido la iniciativa de decidir lo que puedo dar de si y lo que no, sin antes fiarse de mi palabra, es cierto y soy consciente de ello, que toda seguridad a caballo es poca pero uno sabe como es su cuerpo hasta donde puede llegar su limite y hasta donde no, pero lo que no puede ser , es que por miedos, por un exceso de protección se encasille y limite a una persona sin consultar con ella, no podemos en ningún caso hacer de la palabra discapacidad un drama, porque no lo es, simplemente es una forma de vida, es otra forma de hacer las cosas pero eso no significa que seamos personas especiales,simplemente somos personas como otras pero catalogadas , en una absurda palabra.
Afortunadamente y tras siete años de mucha lucha, y mucho trabajo, tengo una entrenadora que ve más allá de mi físico , sabe escuchar y dar la oportunidad de expresarme y de que yo evolucione en la doma clásica adaptada .Jose
sábado, 30 de mayo de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Qué razón llevas en lo que expones! Me alegro que al fin hayas dado con una buene preparadora. Sigo otro día. Un abrazo cariñoso.
ResponderEliminar